RIESGOS EN EL SECTOR DE LA HOSTELERÍA

Aunque en la  Evaluación de Riesgos laborales específica de cada empresa se estudiarían más exhaustivamente los siguientes puntos, de forma muy genérica en el SECTOR DE HOSTELERÍA encontramos  los siguientes riesgos:

 

  • Caídas al mismo nivel: riesgo de accidente laboral cuando realizamos operaciones y tareas sobre el pavimento de la empresa, dado que podemos caernos, resbalar, tropezar, torcernos el tobillo o dar un paso en falso. Las posibles causas debemos buscarlas en: a) Los suelos sucios o resbaladizos. b) La existencia de obstáculos en los lugares de paso o accesos. c) La falta de iluminación. d) Los suelos irregulares o con aberturas.

 

  • Caídas de altura. riesgo de accidente laboral cuando realizamos operaciones y tareas a distinto nivel. Las posibles causas debemos buscarlas en: a) Escaleras. b) Altillos o zonas de trabajo elevadas. c) Almacenamientos elevados. d) Huecos o aberturas en el piso. e) Distintos niveles en las salas de trabajo

 

  • El utillaje de trabajo: cortes y amputaciones Muchas de las lesiones que se producen en los lugares de trabajo se deben a la utilización de utillaje. Manipular sin el debido cuidado los aparatos de corte (cuchillos, picadoras, batidoras, etc.) puede ser causa de lesiones importantes. Las posibles causas debemos buscarlas en: a) Picadoras, batidoras. b) Máquinas de alimentación manual. c) Utensilios de corte (cuchillos, machetes, cortadores, etc.). d) Utensilios de corte para el lavado en fregaderos. e) Lavavajillas y utensilios de corte en mal estado. f) Latas, envases en general, vidrio con bordes cortantes, etc. Utilizar adecuadamente el utillaje repercutirá en nuestra integridad física y facilitará el trabajo bien hecho. Las principales causas de lesiones provocadas por la manipulación de utillaje son: su uso inapropiado, el utillaje defectuoso y el almacenamiento incorrecto.

 

  • Corremos el riesgo de quemaduras por el contacto con objetos o gases calientes. Las posibles causas debemos buscarlas en: a) Recipientes de cocina. b) Freidoras. c) Hornos. d) Fogones. e) Vajilla de hornos. f) Fuegos. g) Vapores.

 

  • La electricidad Se pueden producir dos tipos de contacto eléctrico: el directo, que es el que se produce con las partes activas de la instalación; y el indirecto, que es aquel que se produce con masas puestas en tensión. Ambos, pueden producirse por instalaciones eléctricas y/o herramientas o máquinas dañadas. Así, las posibles causas podemos buscarlas en: a) Cables, conductores y cajas de distribución. b) Dispositivos de conexión. c) Sistemas de alumbrado eléctrico. d) Utilización de equipos eléctricos y manipulación de instalaciones eléctricas con las manos o los pies mojados o con ropa húmeda. e) Modificaciones en las instalaciones o en los equipos eléctricos originales. f) Conductores dañados (por ejemplo; recodos, hilos de cobre al descubierto, etc.). g) Cajas de instrumentos dañadas.

 

  • Los incendios Los focos más comunes pueden ser: fogones, cigarrillos, chispas, fuegos mal apagados, fallos eléctricos, etc. Un incendio puede estar producido por la utilización en el trabajo de: a) Sólidos inflamables (papel, cajas, trapos). b) Líquidos inflamables (disolventes, alcoholes). c) Presencia de focos de ignición (cigarrillos encendidos, mecheros, chispas eléctricas, llamas abiertas, etc.). d) Ambiente con mezcla de aire y gases inflamables (gas natural, butano, propano). e) Instalaciones de gas

 

  • Quimicos Así, los posibles peligros se producirán cuando entremos en contacto con productos que contengan sustancias químicas peligrosas: a) Detergentes. b) Sustancias cáusticas y corrosivas (lejía, amoniaco, salfumán–agua fuerte, etc.). c) Fluidos frigoríficos. d) Aerosoles.

 

  • La postura de trabajo Las posturas de trabajo desfavorables no sólo contribuyen a que el trabajo sea más pesado y desagradable, adelantando la aparición del cansancio, sino que a largo plazo, pueden tener consecuencias más graves. La postura de trabajo más confortable es la de sentado, pero puede convertirse en incómoda si no se tienen en cuenta los elementos que intervienen en la realización del trabajo, o si no se alterna con otras posiciones que, a ser posible, impliquen un cierto movimiento. El trabajo de pié implica una sobrecarga de los músculos, de las piernas, espalda y hombros.

 

  • La manipulación de cargas La legislación no establece un peso máximo para la manipulación de cargas. Sin embargo, existen grupos de trabajo e investigaciones en el campo de la ergonomía que consideran aceptable una masa máxima de 25 Kg., cuando las condiciones óptimas de manutención se respetan. Son susceptibles de provocar posibles peligros, los trabajos realizados manejando cargas o los realizados en posiciones forzadas: a) Alzando y transportando cargas. b) Poniendo los brazos en alto. c) Trabajando en espacios estrechos. d) Realizando movimientos repetitivos. e) Trabajando de pie.